Hay pase de facturas en la interna de «Juntos por el Cambio»: la visita del alcalde porteño macrista dejó dos patinazos inolvidables.
El alcalde de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, se confundió de provincia. Presente en La Pampa para la campaña electoral que en nuestra provincia se pobló de estrellas dirigenciales del macrismo porteño, soltó: «acá en La Rioja ganamos por diez puntos».
El patinazo se produjo mientras hablaba con una radio de General Pico. «Está perdido, Horacio», le sugirió el periodista, en tono amigable, mientras Martín Lousteau, presente en la misma entrevista, trataba de auxiliario y lo corregía al aire. «Perdón, estamos recorriendo todo el país…», intentó justificarse.
La confusión entre provincias se produce en el marco de una campaña en la que el Frente de Todos advierte que la dirigencia del macrismo porteño, que discriminó a La Pampa mientras fue gobierno nacional, desembarca ahora en la provincia por un rédito electoral. El propio candidato a senador Daniel Kroneberger admitió días atrás que a la provincia antes nadie le daba importancia por su escaso caudal electoral.
La visita con fallidos de Rodríguez Larreta generó un pase de facturas en la interna de Juntos por el Cambio: el nivel de «porteñización» de la campaña venía siendo un tema puertas adentro. En la mirada de algunos dirigentes de la UCR, ya Patricia Bullrich «se pasó de rosca» cuando apareció con las remeras de «La Pampa o La Cámpora». El gobernador Sergio Ziliotto denunció que la oposición pampeana se subió a la campaña del odio. Y la visita de Rodríguez Larreta representó un par de pasos para atrás. Las últimas encuestas muestran que el Frente de Todos recuperó votos en La Pampa.
El patinazo geográfico del jefe de Gobierno porteño se sumó a la falta de explicaciones respecto de la situación que lo involucra con el médico René Favaloro, quien antes de suicidarse denunció en una carta que lo querían coimear para arreglar una deuda con el PAMI. En ese momento, Rodríguez Larreta era interventor de la obra social de jubilados y jubiladas. Cuando El Diario le preguntó por ese tema, Rodríguez Larreta interrumpió la pregunta, se negó a responder y dio por terminada la entrevista con un «no estoy para esa pregunta».
La gambetea del «presidenciable» generó cierto impacto en medios nacionales y un cortocircuito dentro de su equipo, ante la evidencia de la falta de preparación para responder sobre un tema que no es novedad.